Una de las cuestiones que salen a relucir recurrentemente cuando se habla del coche eléctrico es si se puede viajar con este tipo de vehículos. Para salir de dudas, dos periodistas, mis compañeros Alberto De La Torre y Mario Arroyo de Xataka, se atrevieron a recorrer 2.500 kilómetros en coche eléctrico por Europa.
Lo que sacaron en claro de la experiencia es que se puede viajar perfectamente en coche eléctrico, aunque todo depende de las necesidades de cada uno.
Es más barato y más cómodo, pero no más rápido
El viaje les llevó de Berlín a Madrid. En la primera etapa se pusieron al volante de un Tesla Model Y Long Range RWD y luego lo cambiaron por un Tesla Model 3 Gran Autonomía.
Es un trayecto lo suficientemente largo como para sacar varias conclusiones, pero el resumen es sencillo: según cuenta Alberto, hoy por hoy, se puede viajar perfectamente en coche eléctrico, al menos por Europa. Por mi experiencia, siempre en recorridos más cortos, eso sí, solo puedo darle la razón.

Pero claro, si la cuestión se limita a poder o no poder, también es justo decir que es posible viajar en patinete eléctrico o en burro. La clave está en cómo se lleva a cabo ese viaje y el artículo de XTK aclara muchas cosas en este sentido. Y es que la experiencia de viajar en coche eléctrico ha mejorado mucho a lo largo de los últimos años, hasta el punto de no tener mucho (o nada, en según qué casos) que envidiar a viajar en coche de gasolina o diésel.
Hay que tener en cuenta que la mayor parte de este viaje trascurrió por Alemania y Francia, dos países donde la infraestructura de carga ya es muy amplia y donde la red de cargadores de Tesla, que es el operador que más se utilizó para cargar os dos coches, es especialmente buena, no solo porque tiene muchos puntos de carga, sino porque los que tiene funcionan bien y de forma sencilla.
Como dice Alberto, la experiencia se empañó un poco en España porque nuestra infraestructura pública de recarga es bastante más deficiente que la que tienen Alemania y Francia, pero no es tan mala como para no poder viajar en coche eléctrico por nuestro país. Lo bueno es que está mejorando, tanto en número de cargadores como en la potencia de los mismos.

Otra de las cuestiones de las que habla el artículo es de los tiempos de carga. Alberto cuenta que la experiencia fue muy positiva porque recargaron los coches más rápido de lo que esperado, asegurando que la mayoría de las veces necesitaron más tiempo de descanso para ellos que para recargar los Tesla, puesto que conseguían recuperar suficiente energía para seguir el viaje en cuestión de unos 15 minutos. Una vez más, conviene hacer hincapié en que conducían un Tesla y utilizaron los cargadores de la marca; con otros coches que se recarguen más lento o con unos cargadores menos potentes, la experiencia cambiaría drásticamente.
Aun así, en otro artículo que se publicó después, Alberto reconoce que, desde el punto de vista del tiempo, “lo que más rentable sale es, sin duda, el vehículo diésel”. De momento, esta batalla la ganan claramente los diésel, sencillamente porque hay que parar mucho menos que con un eléctrico, de hecho, con muchos diésel se podrían completar los 2.500 km con tres paradas, sin apurar, y probablemente con dos paradas, aunque eso implicaría jugársela un poco. Alberto y Mario hicieron 12 paradas para recargar con los Tesla y necesitaron cuatro jornadas para completar el viaje.
Otra de las ventajas de los diésel es que se repostan en menos tiempo: en ningún caso se necesitan 15 minutos para llenar un depósito por completo. Por lo tanto, si tienes prisa, viajar en diésel sigue siendo la mejor opción.

En cambio, Alberto pone sobre la mesa otra cuestión que inclina la balanza a favor de los eléctricos a la hora de viajar: son más baratos que un gasolina e incluso que un diésel. El coste total de hacer 2500 km entre Berlín y Madrid fue de 169,36 euros, mientras que con un gasolina, mis compañeros calculan que se habrían gastado 305,97 euros y con un diésel 222,98 euros. Su conclusión es clara: el coche eléctrico compensa económicamente.
Otras de las ventajas de los eléctricos de las que habla Alberto tiene que ver con el confort, tanto por viajar sin ruido ni vibraciones, como por la posibilidad de conducir de forma más sencilla con un solo pedal. Eso sí, hay que tener más tiempo y hay que planificar bien los viajes, no se puede improvisar tanto como con un coche térmico.
Eso sí, como concluye Alberto, cada conductor es un mundo y tiene sus propias circunstancias, por lo que no se puede decir que un diésel o un eléctrico sean la solución definitiva. Todo depende de cada caso.
Encuentra tu coche eléctrico ideal

Si te has planteado comprar un coche eléctrico, esto te va a interesar. Hemos creado el Recomendador personalizado de coches eléctricos en el que además de ver los modelos que se adaptan a tus necesidades también tendrás respuestas a las dudas que más te pueden preocupar como el precio, la autonomía o los puntos de carga cercanos.
Imágenes | Tesla y Peugeot